El sábado fue la final de uno de los concursos de música más populares que se celebra en Suecia cada año, me refiero a Melodifestivalen, o "Festival de la Melodia" literalmente traducido desde el sueco, y no es más que el concurso sueco para escoger la canción que representará a Suecia en Eurovision que es la compentencia entre todos los países europeos.
Participan un total de 32 concursantes y compiten 8 cada sábado durante 4 semanas, en distintas ciudades del país. Se escogen dos en cada competencia que van directo a la final mientras que dos más pasan a lo que le llaman Andra Chansen o "la segunda oportunidad", que es otra gala pasadas las 4 semanas ordinarias, de la cual salen dos concursantes más para la final en Estocolmo, para así completar un total de 10.
El género de música que predomina es el shlager, como se conoce aquí, y que no es más que una especie de música disco con un montón de efectos, luces y una letra pésima que no dice absolutamente nada, pero es el ritmo lo que importa. Claro que en la compentencia, puedes oir desde una balada, una canción de rock, country o rap, pero parece ser que es el shlager lo que tiene más público entre los suecos que votan y seleccionan el ganador. Si bien al menos a mí me encanta este tipo de música, no puedo dejar de reconocer que no es el tipo de canción ideal para una competencia a nivel de continente, pues el resto de las canciones que participan tienen una tremenda letra y una interpreatación genial, pero según he oido, incluso en Eurovisión el shlager tiene una gran audiencia.
Algo distinto en este tipo de concursos comparado con otros concursos de música que he visto, es que los participantes no tienen necesariamente que ser amateurs, sino muchos son cantantes conocidos en Suecia; aunque evidentemente cuando todo un país sigue la competencia, la ocasión es ideal para darse a conocer. Abba, el suceso musical más grande en la historia de la música sueca tuvo su debut, precisamente en Melodifestivalen en la década del '70.
Este año, la competencia estaba reñida en mi opinión, pues había grandes interpretaciones como Sanna Nielsen con "I'm in love", Brolle con "7 days and 7 nights" o una de mis favoritas, Linda Bengtzing con "E det fel på mig"; sin embargo, el ganador fue Eric Saade con todo un numerazo del tan mencionado shlager y una tremenda actuación, que fue precismente como su título indica bien "Popular". Enjoy!
Participan un total de 32 concursantes y compiten 8 cada sábado durante 4 semanas, en distintas ciudades del país. Se escogen dos en cada competencia que van directo a la final mientras que dos más pasan a lo que le llaman Andra Chansen o "la segunda oportunidad", que es otra gala pasadas las 4 semanas ordinarias, de la cual salen dos concursantes más para la final en Estocolmo, para así completar un total de 10.
El género de música que predomina es el shlager, como se conoce aquí, y que no es más que una especie de música disco con un montón de efectos, luces y una letra pésima que no dice absolutamente nada, pero es el ritmo lo que importa. Claro que en la compentencia, puedes oir desde una balada, una canción de rock, country o rap, pero parece ser que es el shlager lo que tiene más público entre los suecos que votan y seleccionan el ganador. Si bien al menos a mí me encanta este tipo de música, no puedo dejar de reconocer que no es el tipo de canción ideal para una competencia a nivel de continente, pues el resto de las canciones que participan tienen una tremenda letra y una interpreatación genial, pero según he oido, incluso en Eurovisión el shlager tiene una gran audiencia.
Algo distinto en este tipo de concursos comparado con otros concursos de música que he visto, es que los participantes no tienen necesariamente que ser amateurs, sino muchos son cantantes conocidos en Suecia; aunque evidentemente cuando todo un país sigue la competencia, la ocasión es ideal para darse a conocer. Abba, el suceso musical más grande en la historia de la música sueca tuvo su debut, precisamente en Melodifestivalen en la década del '70.
Este año, la competencia estaba reñida en mi opinión, pues había grandes interpretaciones como Sanna Nielsen con "I'm in love", Brolle con "7 days and 7 nights" o una de mis favoritas, Linda Bengtzing con "E det fel på mig"; sin embargo, el ganador fue Eric Saade con todo un numerazo del tan mencionado shlager y una tremenda actuación, que fue precismente como su título indica bien "Popular". Enjoy!
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